Vecinos privilegiados con una histórica velada en la que, por primera vez, después de más de 30 años regresó a la provincia la magia del autocine.
El aislamiento social al que exige el coronavirus tiene muchas cosas malas, pero el regreso de poder ver cine en el auto familiar o en pareja es sin dudas una de las pocas cosas buenas que trajo esta pandemia.
El regreso de este singular sistema y, con él, también del cine, que estuvo entre las primeras bajas desde la llegada del coronavirus al país, convierten en históricas las dos funciones que se realizaron este sábado en El Bosquecito, un predio muy significativo de la ciudad que fue otros años escenario de numerosos festejos y encuentros, como el 9 de Julio Criollo, la Posta de las Cabalgatas de la Fiesta Criolla o los multitudinarios festejos del Día del Niño.
El primer autocine de pandemia llegó a la provincia gracias a la iniciativa de la gestión de la intendenta de Estación Juárez Celman, Myrian Prunotto, y su equipo de gobierno, quienes no dudaron un minuto en ponerse a trabajar para hacerlo posible desde el primer minuto que el COE aprobó protocolo que habilitaba este tipo de espectáculos.
“Estamos muy contentos con la aceptación que tuvo en nuestra gente y con la repercusión en los principales medios provinciales y hasta nacionales que no dejaron de difundir esta buena noticia desde hace una semana”, expresó la intendenta Prunotto.
“Siento una gran emoción de que podamos ofrecer esta alternativa de entretenimiento, que garantiza la máxima seguridad por el grado de aislamiento de los espectadores, que sólo comparten un espacio con su entorno familiar”, agregó la jefa comunal.
Cómo fue la función
Por las limitaciones que impone el protocolo del COE, los ocupantes de sólo 120 automóviles pudieron disfrutar esta primera experiencia, pero se mostraron plenamente satisfechos, en especial los niños que jamás habían experimentado ver cine desde su asiento del auto.
“A diferencia de los sistemas que tenían los autocines de antes, ahora se disfruta la calidad de imagen que ofrece una pantalla gigante led y un sonido que llega con alta fidelidad a cada vehículo por frecuencia de FM”, destacó el secretario de Cultura de la Municipalidad de Estación Juárez Celman, Federico Menis, uno de los principales responsables de llevar adelante la iniciativa.
Disfrutar cada minuto
La puesta a punto para las dos funciones es uno de los aspectos más destacables del evento. Al ingreso del predio, dos grandes tótems de seis metros de altura dejaban pasar los haces de luz de los buscacielos que anunciaban que algo histórico estaba sucediendo en el lugar.
Bomberos voluntarios de la ciudad y personal municipal tenían todo dispuesto para acomodar a los vehículos de cada función y luego atenderlos con un servicio de bufet delivery.
“Metegol” en la primera función y “Desertor” en la segunda fueron las películas que se disfrutaron en la velada, que dejó abierto el paso para un nuevo e inesperado entretenimiento en el marco de la pandemia.
