El viernes 10 de enero fue una jornada histórica de resistencia y participación ciudadana en Bahía Blanca.

 

Un Concejo Deliberante colmado de vecinos y vecinas,  de hacedores culturales, organizaciones de base y comunidad, que en su conjunto demostró su descontento ante la injusticia y el atropello que hubiera significado la derogación de ordenanzas que atañen a la cultura.

Estas ordenanzas vigentes, son producto de años de debates y acuerdos cuyo fin no es otro que la construcción de un proyecto de políticas culturales plurales e inclusivas. Atentar contra ellas pretendiendo borrar su significación es un acto de violencia, que de no haber sido frenado, hubiera hecho estragos en la estructura jurídica, con resultados previsiblemente nefastos para el respeto y el acceso a los derechos culturales constitucionalmente salvaguardados y en la realidad concreta de la cultura bahiense.

Creemos que la mejor forma de que el Estado llegue a los barrios con políticas públicas -y a todos los sectores- es dando a conocer estas herramientas de participación y no derogándolas; es sumando voces y no quitando derechos.

La lucha de este viernes impidió el tratamiento en el HCD de ese proyecto sin sustento.

Por otra parte, se logró acordar una instancia de diálogo en la que participarán el presidente del Concejo Deliberante, el presidente del bloque de Juntos por el Cambio, la Comisión de Cultura del HCD, el bloque Arturo Illia, representantes del bloque del Frente de Todos, con el expreso pedido, de parte del sector artístico-cultural, de que estén presentes la directora del Instituto Cultural, la Lic. Morena Llanca Roselló y el intendente Héctor Gay.

También se logró el compromiso de parte del oficialismo que, hasta tanto no se avance en esta mesa de diálogo y en una propuesta superadora para la ciudad, no se presentará ni tratará ningún proyecto de ordenanza que proponga derogaciones o sustituciones a las vigentes.