Arquitectos lamentan “otra muerte evitable”
A sólo 18 meses de la tragedia de Punta Mogotes, donde una madre y su hija murieron sepultadas por el derrumbe de un alero sobrecargado de una construcción en altura, una mujer corrió la misma suerte al ser alcanzada por el desprendimiento del revestimiento de un quinto piso de un edificio de la calle Arenales, el pasado viernes.